El vehículo es uno de los bienes más preciados de todo conductor. No solo porque implica una importante inversión de dinero, sino porque además sirve para simplificar y mejorar nuestra vida. Por este motivo, es necesario que aprendamos a cuidar este bien tan preciado, a fin de alargar su vida útil y evitar que sus prestaciones se deterioren con el paso del tiempo. ¿Quieres saber cuáles son las pautas para cuidar tu coche como es debido? 

Cuál es la vida útil de un vehículo

Por lo general, un automóvil tiene una vida útil de entre 14 y 20 años, dependiendo del cuidado y mantenimiento que le haga su propietario. En España, casi el 62% del parque automovilístico supera la década. Esto es debido a que los conductores tratan de estirar la durabilidad de sus vehículos lo máximo posible. 

Otra manera de calcular la vida útil de un vehículo y por medio de sus kilómetros. Por ejemplo, se establece que la vida útil de un coche de gasolina ronda entre los 150.000 km y los 200.000 km de media. En el caso de los automóviles diésel esa cifra puede llegar a superar los 300.000 km. No obstante, todas estas cifras no son válidas en todos los casos. Para que un vehículo llegue a su jubilación en buenas condiciones hay que tener en cuenta también la manera de conducir, el mantenimiento y cuidado del automóvil, el tipo de carretera por el que se suele conducir, etc. Es decir, si intentas estimar la vida útil que le queda a tu coche has de tener en cuenta aspectos importantes como:

• La realización del mantenimiento del vehículo en los periodos de tiempo recomendados por el fabricante. 
• Los tipos de recambio que se usen en las reparaciones. 
• Una conducción que no suponga un sobreesfuerzo o desgaste del automóvil. 
• El uso de carreteras en buen estado. 

Cómo puedo prolongar la vida útil de mi coche

Como ya habrás podido deducir, alargar la vida útil de un vehículo depende directamente del trato y uso que le des. Un error muy común es esperar a que dé problemas para empezar a preocuparse por su mantenimiento y cuidado. Toma nota de las siguientes recomendaciones para disfrutar de tu coche por muchos años. 

Comprobar la presión de los neumáticos

Las ruedas son uno de los elementos más importantes de todo automóvil. Ten en cuenta que son la única pieza que se mantiene en contacto con el suelo. Es decir, si la presión es excesivamente baja, las gomas se calentarán mucho afectando directamente al funcionamiento del vehículo, pudiendo llegar, en el peor de los casos, a causar un accidente. Por esta razón, es imprescindible que revises la presión de tus neumáticos en frío al menos una vez al mes. 

Mantenimiento regular

A continuación, vamos a mencionar la vida útil de determinadas piezas de todo vehículo que han de ser revisadas cada cierto tiempo:

• Correa de distribución: sustituir cada 100.000 km – 180.000 km.
• Alternador: cambiar a los 200.000 km. 
• Inyectores: tienen una vida útil de unos 300.000 km – 400.000 km. 
• Amortiguadores: sustituir a los 60.000 km – 80.000 km. 
• Frenos: las pastillas de freno tienen una vida útil de unos 60.000 km. 
• Embrague: el desgaste de esta pieza va directamente ligado al modo de conducción. Su vida media oscila entre los 30.000 km y los 200.000 km. 

Cambiar el aceite

El aceite es el componente que ayuda a mantener limpio el motor, ya que permite el arrastre de impurezas. Además favorece su buen funcionamiento al lubricar anillos, pistones, cilindros, cigüeñal, etc. No descuides el cambio de aceite de tu coche, si quieres alargar su vida útil. Hazlo cada 15.000 km o bien cada año. 

Cuida tu forma de conducir

Finalmente, también debemos prestar atención a nuestra forma de conducir. Por ejemplo, es importante que no subas el coche sobre los bordillos, evitar los giros bruscos y las frenadas repentinas, procura no conducir con un pie sobre el embrague, no des acelerones innecesarios, haz correctamente los cambios de marchas y llena el tanque de gasolina antes de que llegue a la reserva. 

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